18 de febrero de 2025
Carlos Restrepo Piedrahita, el visionario que soñó con la Corte Constitucional
Por: Angie Suárez
Con ocasión de la conmemoración de los 33 años de este Alto Tribunal, magistradas(os), exmagistradas(os), fiscal, procurador e importantes personalidades acudieron a nuestra Universidad para hacer un recuento de los hechos que antecedieron a la creación de la Corte y rendir un homenaje a quienes fueron fundamentales en su creación.
La Corte Constitucional ha sido guardiana de la integridad y la supremacía de la Constitución Política de 1991, nuestra Carta Política. En virtud de ello, cada conmemoración de su invención resulta fundamental para recordar que, tal como lo indicó el Magistrado Jorge Enrique Ibáñez, presidente de la Corte Constitucional, el control judicial de constitucionalidad y con él la creación de una jurisdicción constitucional en Colombia es, sin duda, una de esas creaciones genuinamente colombianas.
Es un mecanismo propio que ha transformado el derecho y la justicia en nuestro país, y cuyos precursores van en línea con los principios de libertad, justicia y dignidad que distinguen nuestra Universidad. Uno de ellos nuestro ilustre profesor, exconsejero de Estado y exsenador: Carlos Restrepo, quien fue homenajeado durante este magno evento por ser la primera figura que impulsó en el año 1966 la creación de la Corte.
En palabras del Magistrado Ibáñez: “se le debe reconocer el mérito de haber promovido, en diversas oportunidades la iniciativa de separar las funciones de la Corte Suprema de Justicia, como cabeza de la Rama Jurisdiccional, de la defensa de la integridad de la Constitución”.
El profesor Restrepo Piedrahita fue un humanista excepcional, dedicó su vida a la academia, a la enseñanza del derecho y al servicio de la patria. Algo que destacó nuestro rector, Hernando Parra Nieto, durante el evento. “El trabajo del profesor Restrepo sobre la necesidad de crear un tribunal o corte constitucional para salvaguardar los derechos de los ciudadanos a tiempo de que actuara como contrapeso real frente al ejecutivo, fue el centro de sus cavilaciones en estas aulas”, dijo.
Así como era un humanista excepcional también fue un gran docente. Dejó una huella imborrable no solo en quieres tuvieron la fortuna de ser sus alumnas(os), sino también en quieres lo conocieron y llevan consigo sus lecciones de vida. Así lo manifestó el profesor emérito y procurador delegado para los derechos humanos, Néstor Osuna, quien se imaginó a Carlos Restrepo en las aulas de nuestra Universidad.
“Quiero imaginar que Carlos Restrepo, uno de los inspiradores de la Constitución que le dio vida a la Corte Constitucional, recorrería en estos tiempos las aulas y las escaleras de nuestra Universidad con su verticalidad a toda prueba y su cultura cosmopolita para exponerle a las(os) estudiantes los más recientes avances de las sentencias de la Corte, cuyos argumentos entrelazaría magistralmente con las lecciones de los clásicos”, dijo.
Con ocasión de esta conmemoración, el presidente de la Corte entregó una placa conmemorativa al rector Hernando Parra Nieto, en reconocimiento al invaluable legado de Carlos Restrepo. Este gesto simboliza el homenaje a su visión y lucha por la creación de la Corte Constitucional y la perpetuación de sus principios en la enseñanza del derecho que hoy se materializan en el instituto que lleva su nombre, liderado por Floralba Padrón, así como en la protección de los derechos fundamentales, uno de los encargos de la Corte.
El encuentro también fue el escenario propicio para homenajear a María Teresa Garcés Lloreda, cuyo nombre resulta muy conocido para quienes siguieron de cerca el proceso de creación de la Corte Constitucional. Tenía un encargo especial: organizar las mesas preconstituyentes; pero la vida le permitiría ser constituyente y, además, ser parte de la Comisión Cuarta, la de asuntos de justicia, la misma que luego crearía a la Corte Constitucional.
Para honrar su legado Gustavo Zafra, delegatario de la Asamblea Nacional Constituyente, expresó algunas palabras de agradecimiento a María Teresa y le entregó un reconocimiento a su labor en este proceso. “Para los estudiosos de la historia de la Constitución del 91 es fundamental la pluma y el intelecto de María Teresa en concurso con otros constituyentes”, manifestó.
Desde la gestación hasta las decisiones de la Corte: un análisis académico
Para enriquecer la discusión, profundizar en la historia de los debates que antecedieron la creación de la Corte y reflexionar sobre sus retos, se llevaron a cabo tres paneles que exploraron la gestación, oportunidad y necesidad de la Corte Constitucional, la garantía del orden constitucional ante situaciones excepcionales y urgentes, y las decisiones de tutela que remueven obstáculos para la garantía del orden constitucional.
En ellos participaron: María Teresa Garcés Lloreda y Juan Carlos Esguerra Portocarrero, delegatarios a la Asamblea Nacional Constituyente; Manuel José Cepeda Espinosa, exmagistrado y expresidente de la Corte Constitucional; y Diana Fajardo Rivera, magistrada y expresidenta de la Corte Constitucional.
Los exmagistrados: Antonio José Lizarazo Ocampo, Alejandro Linares Cantillo, Eduardo Cifuentes Muñoz y Mauricio González Cuervo; Humberto Sierra Porto, director del Departamento de Derecho Constitucional; y Martha Victoria Sáchica, exsecretaria general de la Corte Constitucional. También las(os) magistradas(os) Natalia Ángel Cabo, Cristina Pardo Schlesinger, Juan Carlos Cortés, Miguel Polo Rosero y Vladimir Fernández Andrade; y el exmagistrado Alberto Rojas Ríos.
El evento culminó con un homenaje a la memoria de los exmagistrados de la Corporación que han fallecido, entre ellos nuestro exrector Juan Carlos Henao resaltando sus aportes en la consolidación de la Corte. Además, se realizó el lanzamiento del libro ‘In Memoriam’ y el sitio web de la Constitución Política de 1991.
La Corte Constitucional es un sistema que nació de la esperanza y de la fe en el derecho como motor de transformación social, y que con el tiempo se ha consolidado como el guardián de la democracia porque, tal como lo dijo alguna vez nuestro ilustre externadista:
“Vale la pena vivir y batallar por Colombia. Qué regocijante es sentirse colombiano. ¡Sintámonos orgullosos por Colombia! Aún en las horas de su más infausta desdicha”.















